Namakura Katana, la animación japonesa más vieja de la historia
Namakura Katana (La espada sin filo, 1917) es un corto de dos minutos acerca de un samurai que intentar poner a prueba su katana recién comprada con la inocente gente de un pueblo. Al final termina fallando miserablemente. Con casi 100 años de antigüedad, es considerada la animación japonesa más antigua de la historia (la animación Katsudo Shashin puedo haber sido creada a mediados de 1907 pero no existe una prueba real sobre ésto).
Junichi Kouichi, su creador, hizo este corto animado utilizando recortes de papel dispuestos sobre una mesa que movía y cambiaba para crear los movimientos de los personajes. Esta fue una técnica que más tarde sería llevada a un nivel de excelencia artística de la mano de los directores de animación japonesa de 1930, como es el caso de Kobutori Jisan.
Este filme se creía perdido hasta que se encontró una copia en una tienda de antigüedades de Osaka el 27 de marzo de 2008, junto con los trabajos de Seitaro Kitayama.
Kouichi y Kitayama son considerados "los padres del anime japonés", dijo Yoshiro Irie, del Investigador del Centro Nacional de Cine.
"Ahora todo está digitalizado, pero estas primeras animaciones japonesas se hicieron en los mismos principios que se utilizan hoy en día", dijo Irie.
“Mientras que el anime moderno a menudo se utiliza para contar historias complejas y oscuras, las primeras películas de animación japonesas principalmente dejaban a los espectadores sorprendidos con el simple hecho de que las fotos se movían”, contó Irie.
Vía TF